Escribo esta especie de nota en mi oficina mientras escucho a lo lejos al Residente y al Visitante, miembros de Calle 13 que descargan de manera informal frente a un auditorio enardecido aquí en la EICTV de San Antonio de los Baños.
Hace unos tres o cuatro días terminó el taller Nacional de la Crítica Cinematográfica de Camagüey a donde fui invitado por sus organizadores ya que se haría una retrospectiva de mis trabajos y mi presencia allí se aprovecharía para impartir un taller de realización a los estudiantes de Medios Audiovisuales, miembros de la AHS y demás interesados. El Taller es un evento de discusión y generación de pensamiento que permite además a una gran cantidad de camagüeyanos ver cine de todo tipo de género y de calidad.
Por las mañanas desde el 17 al 19 se desarrollaba el evento teórico que orbitó entre el homenaje a la Cinemateca de Cuba, las mujeres en el audiovisual cubano y los jóvenes realizadores. El viernes 19, último día de las sesiones teóricas, el tema era los jóvenes realizadores y aunque no era uno de los ponentes, sí quise aportar algo a la discusión. En este blog ya dejé claro mi posición sobre el asunto, así que no voy a redundar en ello; apunté ante un nutrido público joven, lo que pienso sobre el tema y hablé de los nuevos-viejos realizadores del audiovisual cubano, poniendo en crisis el manido criterio determinista que asocia juventud en materia de edad en proporcionalidad directa con técnicas renovadoras y riesgo en el arte, concluyendo que hay mucho que ver, leer y aprender, estar informado y no ser ajeno a lo que ocurre a tu alrededor y en el mundo y lo más importante es hacer, hacer y hacer con los medios que se tengan a tu alcance y el rigor obstinado a la hora de emprender la aventura.
Por las tardes desde una de las aulas del Instituto Superior de Arte de Camagüey cuya sede lo acoge un antiguo y hermoso convento que bien pudiera ser aprovechado como locación para infinidad de historias por los propios estudiantes, a decir del amigo Reynaldo Lastres removí los cerebros de estudiantes de los medios y de aficionados al cine. Fue un pequeño taller, hubiera querido fuera de realización y de por lo menos dos semanas, pero desgraciadamente en tan solo tres días tuve que convertir aquello en un taller de iluminación más que de realización y despertar conciencia sobre que sí se puede hacer audiovisual lejos de la capital.
Para que funcionaran las cosas, partí con la premisa de analizar el proceso creativo del filme, se analizaron los pasos a seguir para producir un audiovisual con escasos recursos materiales y al margen de la industria. Para ¿lograrlo? compartí mis propias experiencias en la creación de “Molina`s Ferozz” mi primer largometraje, (que por cierto, se pre-estrenó la noche del 17 en la sala Nuevo Mundo. Se proyectó dos noches seguidas con mucha afluencia de público y bastante impacto sensorial). Pues nada, la experiencia fue renovadora para mi y espero haber aportado mi granito de arena a los allí presentes intercambiando con ellos mis aventuras y desventuras en el mundo audiovisual que se me antoja el más hermoso de los mundos.
jueves, 25 de marzo de 2010
sábado, 6 de marzo de 2010
MOLINATOR Y LOS "JÓVENES" REALIZADORES
Hola queridos amigos
"Con mucho afecto los saludo", como decía todas las noches el licenciado Armando Lima, hombre del tiempo en la TV cubana, presentador de culto, ya fallecido y a quien deseé siempre tener en uno de mis trabajos audiovisuales.
Les cuento que el pasado 27 de febrero, en la muestra de jóvenes o nuevos realizadores fuí invitado (más por los buenos deseos de Fernando Pérez(presidente honorario o algo así) y de Danáe C. Diéguez que por la voluntad de la própia Muestra en sí) a moderar el MOVIENDO IDEAS sobre el experimental joven cubano. La pregunta que abría el debate era: ¿Intento de experimentación en el audiovisual joven? Reconozco que no las tengo buenas con el cine experimental y todas sus formas y maneras, sea de cualquier parte. Acepté porque ello me daba la posibilidad de mover ideas realmente acerca de ¿qué es ser joven en el arte? y la real juventud del audiovisual joven cubano y sí realmente ser un joven realizador es estar entre los veinte y los treinta pasando por la vida sin saber que pasaste, rodando historias falta de mojo (como diría Austin Powers), anquilosadas en las viejas formas de contar del cine cubano, que viene haciendo las mismas películas hace ciencuenta años, o implica tener ochenta años y rodar películas que por su alto nivel artístico,riesgo estético y pasión parezca hecha por alguien que está en la veintena vivo con los pies en la tierra y como hombre de su tiempo.
Aunque a los realizadores allí presentes no les agradó mucho la provocación, preferían más hablar de las virtudes o defectos de sus obras, se estableció un debate sincero,entre el público que había (que no era mucho, por desgracia) y los jóvenes hacedores de audiovisuales. En el medio, yo, provocando constantemente. Se discutió sobre lo real o falso de la buena voluntad de la institución que auspicia la muestra, el ICAIC, porque yo en particular nunca me he creído el cuento de que en realidad, el cine alternativo, o independiente (aunque la palabra ya no me gusta tanto porque está bastante mancillada), le interese al ICAIC, creo que más bien le preocupa que haya una producción alternativa más interesante y poderosa (gracias a la democratización de los medios tecnológicos con la aparición del digital) que la de la raquítica "Industria" y la organización de una muestra de esa producción alternativa (donde no está todo realmente), es una manera de controlarla. Pero eso, no es lo más preocupante, me preocupa y lo dejé claro allí y fue parte del debate, cómo esos nuevos realizadores se creen el juego y sienten una necesidad fervorosa de pertenecer y de ser absorbidos por el sistema. A veces he visto algún que otro trabajo alternativo con cierta fuerza y riesgo estético y cuando ese joven realizador ha entrado en la rutina de la "industria", termina perdiendo fuerza creativa en sus obras,contando de manera envejecida la misma película de siempre(los que han tenido la fortuna de rodar) o peor aún, haciendo actividad de oficina (como muchos que conozco, algunos han sido alumnos míos) en algún piso de la institución, esperando cuando le toque filmar, si es que le toca. Lo otro que noté y allí también se discutió y me preocupa cada vez más es la falta de riesgo estético y artístico en muchas de las obras, la manera conservadora de poner la cámara o peor, la intención de ser modernos y post modernos aplicando cortes rápidos al más puro estilo MTV en historias que no lo llevan, o ¿complejizando? con efectos digitales, obras que con una narración más simple, volarían más alto y sí serían modernas. Eso fue lo que sentí esa mañana lluviosa de sábado. Mis consejos a los realizadores allí presentes: Sigan sus instintos y crean realmente en lo que hagan, no vendan su alma y lo digo en el más puro estilo Fausto, no compitan contra nadie, sino contra ti mismo por ser mejor cada día, como artista y ser humano y cada vez debes subirte más la parada a nivel creativo. Para terminar, mi más sabio consejo: Sean samurais sin empleadores, un RONIN del arte, porque en mi modesta opinión cuando perteneces a instituciones oficiales o no, eres de alguna manera controlado y debes responder a estrategias e ideologías establecidas, y la pureza del arte debe estar más allá de todo eso. La vida es muy corta, no alcanza para hacer todo lo que queramos. ¡Aprovechémosla! Nada, que hay que sentirse bien con uno mismo.
"Con mucho afecto los saludo", como decía todas las noches el licenciado Armando Lima, hombre del tiempo en la TV cubana, presentador de culto, ya fallecido y a quien deseé siempre tener en uno de mis trabajos audiovisuales.
Les cuento que el pasado 27 de febrero, en la muestra de jóvenes o nuevos realizadores fuí invitado (más por los buenos deseos de Fernando Pérez(presidente honorario o algo así) y de Danáe C. Diéguez que por la voluntad de la própia Muestra en sí) a moderar el MOVIENDO IDEAS sobre el experimental joven cubano. La pregunta que abría el debate era: ¿Intento de experimentación en el audiovisual joven? Reconozco que no las tengo buenas con el cine experimental y todas sus formas y maneras, sea de cualquier parte. Acepté porque ello me daba la posibilidad de mover ideas realmente acerca de ¿qué es ser joven en el arte? y la real juventud del audiovisual joven cubano y sí realmente ser un joven realizador es estar entre los veinte y los treinta pasando por la vida sin saber que pasaste, rodando historias falta de mojo (como diría Austin Powers), anquilosadas en las viejas formas de contar del cine cubano, que viene haciendo las mismas películas hace ciencuenta años, o implica tener ochenta años y rodar películas que por su alto nivel artístico,riesgo estético y pasión parezca hecha por alguien que está en la veintena vivo con los pies en la tierra y como hombre de su tiempo.
Aunque a los realizadores allí presentes no les agradó mucho la provocación, preferían más hablar de las virtudes o defectos de sus obras, se estableció un debate sincero,entre el público que había (que no era mucho, por desgracia) y los jóvenes hacedores de audiovisuales. En el medio, yo, provocando constantemente. Se discutió sobre lo real o falso de la buena voluntad de la institución que auspicia la muestra, el ICAIC, porque yo en particular nunca me he creído el cuento de que en realidad, el cine alternativo, o independiente (aunque la palabra ya no me gusta tanto porque está bastante mancillada), le interese al ICAIC, creo que más bien le preocupa que haya una producción alternativa más interesante y poderosa (gracias a la democratización de los medios tecnológicos con la aparición del digital) que la de la raquítica "Industria" y la organización de una muestra de esa producción alternativa (donde no está todo realmente), es una manera de controlarla. Pero eso, no es lo más preocupante, me preocupa y lo dejé claro allí y fue parte del debate, cómo esos nuevos realizadores se creen el juego y sienten una necesidad fervorosa de pertenecer y de ser absorbidos por el sistema. A veces he visto algún que otro trabajo alternativo con cierta fuerza y riesgo estético y cuando ese joven realizador ha entrado en la rutina de la "industria", termina perdiendo fuerza creativa en sus obras,contando de manera envejecida la misma película de siempre(los que han tenido la fortuna de rodar) o peor aún, haciendo actividad de oficina (como muchos que conozco, algunos han sido alumnos míos) en algún piso de la institución, esperando cuando le toque filmar, si es que le toca. Lo otro que noté y allí también se discutió y me preocupa cada vez más es la falta de riesgo estético y artístico en muchas de las obras, la manera conservadora de poner la cámara o peor, la intención de ser modernos y post modernos aplicando cortes rápidos al más puro estilo MTV en historias que no lo llevan, o ¿complejizando? con efectos digitales, obras que con una narración más simple, volarían más alto y sí serían modernas. Eso fue lo que sentí esa mañana lluviosa de sábado. Mis consejos a los realizadores allí presentes: Sigan sus instintos y crean realmente en lo que hagan, no vendan su alma y lo digo en el más puro estilo Fausto, no compitan contra nadie, sino contra ti mismo por ser mejor cada día, como artista y ser humano y cada vez debes subirte más la parada a nivel creativo. Para terminar, mi más sabio consejo: Sean samurais sin empleadores, un RONIN del arte, porque en mi modesta opinión cuando perteneces a instituciones oficiales o no, eres de alguna manera controlado y debes responder a estrategias e ideologías establecidas, y la pureza del arte debe estar más allá de todo eso. La vida es muy corta, no alcanza para hacer todo lo que queramos. ¡Aprovechémosla! Nada, que hay que sentirse bien con uno mismo.
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